Historia
Mostrando 1–24 de 99 resultadosOrdenado por los últimos
Revolución y reconstrucción
Leonardo Lomelí Vanegashistoria
En Revolución y reconstrucción. La economía política del México posrevolucionario, 1917-1938 prevalece una estrecha relación entre la política, la economía y los movimientos sociales que resulta fundamental para entender la transición de la lucha armada al régimen político y económico que encauzó el desarrollo del país durante la mayor parte del siglo XX.
Su autor, Leonardo Lomelí Venegas —destacado investigador, economista, historiador, académico y actual rector de la UNAM—, despliega una perspectiva analítica desde la economía política para discernir con mayor claridad las etapas de la reconstrucción económica, la consolidación del Estado posrevolucionario y la evolución de las relaciones sociales después de la Revolución mexicana.
Lomelí también asume un enfoque eficaz para exponer la forma en que las relaciones políticas y económicas con otras naciones condicionaron la recuperación y propiciaron una lenta rearticulación de los vínculos entre el Estado y los diversos agentes económicos. Se trata de una obra imprescindible para comprender los procesos que han limitado y condicionado el desarrollo económico, político y social de México.
La historia de México a través de sus centenarios
Carlos Martínez Assadhistoria
Una conocida frase, que todos hemos escuchado alguna vez, afirma que “la historia la escriben los vencedores”. La historia de México a través de sus centenarios es una clarísima muestra de la validez de dicha idea, en la que cinco voces diferentes nos develan, a partir de un enfoque histórico bien fundamentado, de qué manera las conmemoraciones –tradicionales en algunos casos, inventadas en otros– han creado y modificado a lo largo del tiempo el discurso respecto de los principales eventos fundacionales de nuestro país.
Antonio Rubial, por ejemplo, ofrece un panorama de la extravagante celebración del primer centenario de la caída de México-Tenochtitlan y de san Hipólito en 1621, mientras que Cristina Torales Pacheco se refiere a la segunda conmemoración, 100 años después, como un marco importante para la consolidación de un reino novohispano. Esta situación cambió en 1821 con la celebración de México como un Estado independiente, proceso en el que se enfoca el texto de Patricia Arriaga para mostrar cómo el discurso oficial de dicha conmemoración se propuso reconfigurar la historia oficial y llenarla de héroes. Por su parte, Carlos Martínez Assad hace un recorrido desde principios del siglo XX para señalar los grandes avances y cambios aportados por la modernización, y donde las conmemoraciones comenzaron a tomar un tinte más político. Finalmente, el ensayo de Sara Sefchovich nos lleva a reflexionar desde la actualidad sobre las consecuencias que la globalización y la era tecnológica producen en la seguridad y el futuro de todas las sociedades, a la par que describe la última conmemoración de este siglo: el bicentenario de la Independencia de México.
Gracias al amplio panorama que los diferentes textos contribuyen a trazar, este libro muestra en su conjunto una visión realista del pasado y del presente, que no sólo desgaja lo que ha ocurrido internamente en México durante los últimos cinco siglos, sino que también ofrece un contexto mundial y cronológico para entender mejor por qué la historia, más que ser algo estático, es el resultado de la complejidad y evolución de las sociedades.
El sexo de los ángeles y de los santos
Antonio Rubialhistoria
Desde los relatos de martirios hasta las austeras vidas de los santos, Antonio Rubial descubre la manera en que las hagiografías, los discursos sobre la santidad y sus representaciones pictóricas evolucionaron con el tiempo, volviéndose cada vez más espectaculares en su búsqueda por impactar al público devoto. Rubial expone cómo el poder y la política entrelazaron sus tentáculos valiéndose de la creación de historias portentosas para sostener alianzas entre el Estado y la Iglesia que les permitieran mantener el control de las conciencias.
Haciendo uso de agudas reflexiones al final de los apartados, el autor invita a reconocer la forma en que gracias a esta retórica los valores de la moral cristiana –el sufrimiento, la obediencia y la humildad– se vincularon con la sujeción patriarcal, relegaron a la figura femenina a los lugares tradicionales de madre o esposa y justificaron el ejercicio de la violencia sobre los fieles como herramienta válida e, incluso, necesaria.
A medida que exploramos las complejidades de las narrativas religiosas y su influencia en la sociedad, podemos ver reflejados muchos de los dilemas y desafíos que enfrentamos en la actualidad. El sexo de los ángeles y de los santos no sólo arroja luz sobre el pasado, también ofrece una perspectiva relevante para comprender nuestro presente.
Quitemos todo el oropel de entretenidas y morbosas narraciones y nos quedarán los valores centrales que han construido nuestra civilización y que siguen siendo parte de nuestra psique individual y social. Muchos hombres y mujeres en Europa y América continúan sufriendo y victimizándose como los mártires y los ascetas, amando como las monjas hasta la vida eterna y creyendo en el modelo patriarcal de la sagrada familia con los roles tradicionales.
—Antonio Rubial
Luces y sombras del movimiento estudiantil del 68
Sergio Zermeñohistoria
El humo de una vela recién apagada y una simple chispa de fuego pueden avivar la llama, pero, ¿quién es la chispa y quién es el humo? A más de cincuenta años de la matanza de Tlatelolco, Luces y sombras del movimiento estudiantil del 68 ofrece una verdad histórica de lo sucedido antes, durante y después del 2 de octubre de ese año, así como un recorrido detallado por tres etapas importantes para su propia comprensión del evento.
Zermeño comienza con un relato personal de los eventos que presenció en septiembre y octubre de 1968, marcados por la tragedia y la esperanza juvenil, capturando la ingenuidad y la intensidad del momento. Diez años después, desde la distancia de París (donde completó su tesis doctoral bajo la tutela de Alain Touraine), reflexiona serenamente sobre el significado más amplio del movimiento, analizando críticamente sus implicaciones históricas y sociales. Con el paso del tiempo y el distanciamiento geográfico, el autor afirma haber encontrado la claridad necesaria para despojar sus análisis de dogmas y clichés, y para conseguir revisar el evento a la luz de nuevos métodos de análisis y comparaciones globales. Esta reflexión madura se convierte así en el núcleo de su libro, que además analiza las nuevas informaciones que han ido apareciendo sobre los eventos del 68, incluyendo el papel de figuras clave como Luis Echeverría.
Finalmente, el autor se pregunta sobre el futuro de la memoria histórica y las verdades por descubrir, planteando la pregunta provocadora de si será necesario esperar tanto tiempo para aclarar eventos más recientes, como la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa. Es por ello que este libro no es un simple testimonio de un momento crucial en la historia mexicana, sino que constituye también un llamado a la reflexión continua sobre los conflictos sociales y políticos que definen la identidad de México hasta el presente.
El gatuperio
Juan Miguel De Morahistoria
Ni soy historiador ni pretendo serlo. En materia histórica solamente soy un ciudadano encolerizado. Desde hace más de medio siglo, en el entonces Instituto Juárez de Villahermosa, Tabasco, me enseñaron una historia de México ficticia y mentirosa; la culpa, por supuesto, no era de la institución, totalmente respetable, sino de la versión oficial de la historia que imponía el sistema. Después he seguido viendo, lustro tras lustro, que la historia puesta al alcance de la gran masa popular es una historia falsa, con omisiones deliberadas e invenciones no menos intencionales. Creo que, así como la fuerza de los hechos nos obligó a desechar la economía de ficción, ha llegado el tiempo de considerar adulto a nuestro pueblo y liquidar para siempre la historia de ficción. J.M.M.
La consumación de la Independencia Vol. 3
Jaime Olvedahistoria
México es el único país de Hispanoamérica que no reconoce a su libertador porque desde el momento mismo en que Agustín de Iturbide consumó la independencia, el reducido grupo de liberales lo desconoció por haber incluido en el Plan de Iguala la defensa de la religión, la monarquía constitucional como forma de gobierno y por ofrecer el trono del Imperio mexicano a uno de los Borbones.
En el transcurso del siglo XIX, cada 19 de julio, día en que fue fusilado Iturbide, o el 27 de septiembre, aniversario de la consumación, la mayoría de los periódicos de Ciudad de México y algunos de las capitales de los estados, publicaron artículos para convencer a los lectores que ese desconocimiento se debía a los prejuicios ideológicos de los liberales, a quienes responsabilizaron de infundir odio hacia el libertador con el fin de desprestigiarlo y proyectar a Miguel Hidalgo como el padre de la patria.
Este volumen incluye una selección de esos artículos periodísticos que tuvieron la intención de reconocer a Iturbide como el consumador de la independencia de México.
Las revoluciones del siglo XX
Patricia Galeanahistoria
A cien años del inicio de la Revolución Mexicana, la distancia de aquellos hechos nos permite medir su impacto y hacer la historia comparada de los procesos revolucionarios del siglo pasado. Podemos ver sus convergencias, sus divergencias e interrelaciones, como las que se dieron entre el populismo ruso y el magonismo, con sus reivindicaciones democráticas y sociales, en el lema Tierra y Libertad, y su antiimperialismo, común también con la Revolución burguesa en China.
Las ideologías democráticas, anarquistas y socialistas, así como la marxista leninista y su influencia en las revoluciones del siglo XX, son los temas que aborda el presente libro. Se analizan las revoluciones mexicana, rusa, china, vietnamita, cubana y nicaragüense. La metodología comparativa nos permite ubicar en su dimensión real los procesos históricos en el contexto internacional y aquilatar sus logros, así como las demandas que quedaron inconclusas; de ahí el interés de las obras que forman las revoluciones del siglo XX.
La historia de los pueblos no es lineal: cada generación enfrenta nuevos y viejos problemas con nuevas y viejas estrategias de solución, en un proceso interminable de rupturas y continuidades concatenadas entre sí.
Diplomáticas mexicanas
Patricia Galeanahistoria
La desigualdad de género ha sido histórica y universal. Las mujeres han tenido que luchar por cada uno de sus derechos en todos los ámbitos, el diplomático no ha sido la excepción. Gracias al feminismo se inició el estudio de la historia con perspectiva de género, en los años sesenta del siglo pasado. Con esta óptica, nos dimos a la tarea de convocar a miembros del servicio exterior, de la academia y del ámbito cultural de nuestro país, para estudiar las acciones de las primeras diplomáticas mexicanas y visibilizar sus acciones.
La obra que presentamos contiene las semblanzas de diez destacadas mujeres que fueron protagonistas de la política exterior de México a lo largo del siglo XX, desde el triunfo de la Revolución mexicana hasta la primera canciller de nuestro país.
Diplomáticas mexicanas presenta al público lector dos tipos de textos, los testimoniales y los académicos. Los primeros tienen el valor de constituir una fuente de primera mano para conocer a las grandes mujeres biografiadas. Los segundos están basados, mayoritariamente, en los propios expedientes de las pioneras de la diplomacia mexicana.
El impacto de la intervención francesa en México
Patricia Galeanahistoria
La obra que el lector tiene entre las manos aborda el impacto político y económico que tuvo en México y en Francia la intervención napoleónica, así como el impacto social y cultural de estos acontecimientos. En cinco capítulos, 23 historiadores mexicanos, franceses, austriacos, alemanes, holandeses y estadunidenses dan cuenta de todos los bocetos de este complejo periodo de la historia del siglo XIX.
Las guerras son periodos trágicos en la vida de los pueblos, que afectan todas sus estructuras e instituciones. son momentos de choques e intercambios culturales, y también de aceleración del desarrollo científico y tecnológico. La guerra contra la intervención francesa contribuyó a la definición del Estado mexicano, se dio fin al ideal monárquico y triunfaron la República y el proyecto liberal de nación. Para Francia significó el declive el Imperio napoleónico.
Paradójicamente la intervención francesa dio un espaldarazo al liberalismo mexicano. El triunfo de los liberales implicó la supresión de las supervivencias coloniales, con la secularización del Estado y la sociedad. Se liquidó al Estado confesional estamental y se crearon un Estado laico y una sociedad civil. Se suprimió la intolerancia religiosa que había imperado en el país desde la Conquista española, lo que constituyó una profunda revolución cultural.
Patricia Galeana.
La búsqueda del poder
William H. McNeillhistoria
En La búsqueda del poder el historiador William McNeill vincula la historia técnica, político-militar y económica de la forma más reveladora que se ha hecho hasta ahora. El resultado es un trabajo rico en observaciones e hipótesis originales.
McNeill observa una "transformación comercial" de la sociedad mundial en el siglo XI y analiza la adaptación militar china y europea a esta transformación. También ofrece nuevas ideas sobre las consecuencias psíquicas de la instrucción, que convirtió a los ejércitos europeos después de 1600 en entidades sociológicamente diferentes de las existentes anteriormente, así como sobre las alteraciones causadas por las revoluciones francesa e industrial, que atribuye en gran medida a fenómenos demográficos. Además, McNeill considera que la primera y la segunda guerras mundiales marcaron un retorno a las economías y sociedades de mandato, poniendo fin a un experimento de mil años en la organización del esfuerzo humano a gran escala a través del mercado.
De especial interés son el argumento de McNeill de que Gran Bretaña constituyó el semillero para el surgimiento del moderno complejo militar-industrial y su tesis de que nuestra actual capacidad destructiva ha escapado al control global racional debido a un exceso de racionalidad detallada en la planificación y el control tanto de las fuerzas armadas como de la producción industrial.
William H. McNeill es profesor de historia en la Universidad de Chicago. Entre sus muchos libros figuran: Plagas y pueblos, publicado en español por Siglo XXI; Venice: the hinge of Europe, 1081-1797, y The rise of the West: a history of the human community, que obtuvo el National Book Award.
La revolución en los estados de la República Mexicana
Patricia Galeanahistoria
Para comprender en toda su dimensión a la Revolución Mexicana se requiere conocer cómo se vivió en los estados de la República. De esta forma podemos constatar que no fue una, sino muchas revoluciones, y que los tiempos y espacios en que se desarrolló en cada entidad fueron muy diversos, tanto en su inicio como en su culminación. Recorrer este mosaico policromo nos da la visión integral del heterogéneo proceso revolucionario que transformó a México.
Podemos afirmar que la Revolución de revoluciones que inició en fechas distintas en las entidades de nuestra República hacia inicios del siglo pasado, tuvo como común denominador el abismo entre el Estado y la sociedad, entre la plutocracia y la pobreza. El estallido revolucionario fue la reacción ante la supresión de las libertades y la explotación.
El conocimiento de esta historia nos permite comprender al México del siglo XX, y también al del tiempo presente.
Patricia Galeana.
La rebelión permanente
Fernando Mireshistoria
A contracorriente de las usuales valoraciones historiográficas contemporáneas -que abordan los fenómenos sociales mediante esquemas ideológicos preconcebidos-, Fernando Mires se aparta de la Historia anunciada de antemano y se proclama partidario de la historia que se hace: la historia como obra permanente de seres imperfectos, curiosos, apasionados, veleidosos, en fin, seres humanos. En un ameno trabajo de síntesis comparativa -el comparativo, dice el autor, no deja de ser el método de conocimiento más antiguo y efectivo-, siete revoluciones latinoamericanas son cuidadosamente analizadas y comentadas: la revolución de Túpac Amaru; la independencia: un proceso con direcciones contrapuestas; México: un carrusel de rebeliones; Bolivia: la revolución obrera que fue campesina; Cuba: entre Martí y las montañas; Chile: la revolución que no fue, y la larga marcha del sandinismo. Ahora, la peculiaridad del enfoque asumido en modo alguno revierte la historia del continente; simplemente presenta distintos hechos revolucionarios sobre la base de paralelos, diferencias, semejanzas... destacando entre ellos el origen de la revolución (o bien su punto de ruptura), el factor externo, la dimensión del líder o dirigente, los actores y sujetos históricos, el papel de las masas marginales, los agentes clasistas (obreros, campesinos, capas medias) y no clasistas (indígenas, estudiantes, Iglesia, mujeres) y, por último, las razones que determinan el éxito o fracaso de cada proceso.
Fernando Mires nació en Santiago de Chile en 1943. Hasta 1973 fue profesor en la Universidad de Concepción. Doctorado en ciencias económicas y sociales, desde 1975 realiza labor docente en el área de política internacional de la Universidad de Oldenburg, Alemania Federal.
Petróleo y revolución en México
Jonathan C. Brownhistoria
Este libro revisa muchos conceptos erróneos sobre las inversiones extranjeras en América Latina. No ve al inversor extranjero como un cruel opresor pero tampoco como un benefactor amistoso; Jonathan Brown muestra que el crecimiento dinámico de la industria mexicana del petróleo es el resultado tanto de la participación del capital exterior como de la propia reestructuración económica del país, condiciones semejantes a aquellas bajo las cuales el mercado libre está hoy prevaleciendo a lo largo de todo el hemisferio. La voluminosa investigación de Brown sobre las operaciones de las compañías británicas y estadunidenses en México entre 1880 y 1920 revela su involucramiento en la bancarrota política y social que llevó al país a la revolución en 1910. Brown teje una fascinante y, a veces, excitante historia ajena a las complicadas maniobras entre petroleros, políticos, diplomáticos y trabajadores en un periodo de rebeldía social masiva. Las compañías petroleras trajeron a México capital, tecnología y puestos de trabajo, pero también comprometieron su herencia social hondamente enraizada. Brown nos muestra que la respuesta mexicana a esta situación de doble filo fue mucho más eficaz de lo que se ha reconocido. Mexicanos de todas las clases sociales lograron imponer sus propias tradiciones por encima de las poderosas compañías extranjeras, aunque sólo fuera para impedir que el capitalismo moderno destruyera las estructuras sociales y políticas de México. Su éxito fue notable. De manera vivaz, provocativa pero imparcial, con puntadas de humor e ironía, Petróleo y revolución en México interesará a una amplia variedad de lectores: hombres de negocios, economistas, políticos, trabajadores, historiadores sociales y estudiosos de las revoluciones, inversiones extranjeras y relaciones internacionales de América Latina. Jonathan C. Brown es profesor de historia en la Universidad de Texas. Su primer libro, A socioeconomic history of Argentina 1776-1860 (Cambridge University Press, 1979), ganó el premio Bolton de Historia Latinoamericana.
La herencia colonial de América Latina
Barbara H. Steinhistoria
Ningún área del mundo subdesarrollado se ha desenvuelto en simbiosis mayor con Europa occidental que América Latina. Los lazos -económicos, sociales, políticos y culturales- entre la Europa hispana y sus posesiones americanas empezaron a tenderse y a estrecharse desde la conquista misma. ¿Por qué, entonces, después de cinco centurias Latinoamérica forma aún parte del mundo retrasado? Los autores analizan el presente y rastrean en el pasado los factores que han contribuido a esta disparidad de desarrollo. Examinan las instituciones principales del período colonial partiendo de 1700 y señalan la continuación de patrones económicos y sociales hasta los siglos dieciocho y diecinueve. Apuntan que el colonialismo hispano perpetró patrones de dependencia externa tanto en la Península Ibérica como en sus posesiones americanas y que la independencia política no destruyó tales patrones. Este continuo colonialismo-neocolonialismo-dependencia externa con sus redes de intereses asociados es lo que desafía a quienes hoy en día propugnan un cambio, tanto evolutivo como revolucionario. Stanley J. y Barbara H. Stein son historiadores y se desempeñan como profesores en la Universidad de Princeton.
2. La consumación de la Independencia
Jaime Olvedahistoria
A fuerza de repetir el relato histórico fabricado por los liberales en el siglo XIX, los mexicanos llegaron a creer que la independencia de México se obtuvo en 1810, cuando Miguel Hidalgo inició una insurrección en el pueblo de Dolores el 16 de septiembre, de ahí que este día figure en el calendario cívico como la fecha más importante porque, supuestamente, en ese año la nación fue independiente.
Este libro reúne varios editoriales y artículos periodísticos publicados a lo largo de esta centuria, cuyos autores trataron de demostrar que fue esta facción política la que deliberadamente borró de la historia nacional el 27 de septiembre, día en que se consumó la independencia, y desconoció a Agustín de Iturbide como el libertador de México. Estos textos fueron dados a conocer para corregir este error histórico difundido por este grupo político, y para que los mexicanos conmemoraran la verdadera fecha en la que se obtuvo la emancipación de España.
Las relaciones Estado-Iglesia durante el Segundo Imperio
Patricia Galeanahistoria
Durante la primera mitad del siglo XIX, en el proceso de construcción del Estado mexicano, a pesar del fracaso del primer imperio, subsistió la idea de que la monarquía era la solución al dilema de la organización nacional. El triunfo de la República tiene mayor relevancia si se da su justa dimensión al monarquismo mexicano.
En la presente obra analizamos el intento de Maximiliano por unir a la monarquía con la Reforma liberal, conceptos que eran antagónicos en la tradición mexicana, que identificaba la sistema monárquico con las ideas conservadoras. Este intento por llevar a cabo una tercera Reforma desde la perspectiva de una monarquía católica, significó un nuevo impacto del liberalismo europeo en México.
En la realización de la presente investigación se revisaron fuentes documentales, hemerográficas y bibliográficas. Entre las primeras destaca el estudio de la correspondencia de Maximiliano, tanto en archivos nacionales como europeos. También se revisó la abundante folletería que existe sobre la polémica entre las autoridades imperiales y los miembros del clero mexicano.
El moderno sistema mundial II
Immanuel Wallersteinhistoria
La aparición en inglés del primer volumen de El moderno sistema mundial supuso en 1974 el comienzo de una verdadera revolución en la historiografía y un fuerte impulso al renacimiento de la sociología histórica. Más allá de las discrepancias y las polémicas a las que ha dado y está dando origen, esta obra es ya un clásico. Su argumento central es que el moderno sistema mundial toma la forma de una economía-mundo capitalista, que tuvo su génesis en Europa en el largo siglo XV, e implicó la transformación de un modo de producción tributario o redistributivo específico, el de la Europa feudal, en un sistema social cualitativamente diferente, Desde entonces, la economía-mundo capitalista se ha extendido geográficamente hasta abarcar todo el globo; ha seguido un modelo cíclico de expansión y contracción y una localización geográfica variable de los papeles económicos (el flujo y el reflujo de las hegemonías, los movimientos ascendentes y descendentes de los distintos centros, periferias y semiperiferias), y ha sufrido un proceso de transformación secular, incluyendo el avance tecnológico, la industrialización, la proletarización y el surgimiento de una resistencia política estructurada al propio sistema, transformación que está aún en marcha.
Desde tal perspectiva, el siglo XVII, entendido como el periodo que va desde 1600 a 1750, aproximadamente, es ante todo un ejemplo del modelo cíclico de expansión y contracción. En lo que respecta a la geografía general del sistema mundial, las fronteras creadas hacia 1500 no variaron de forma significativa hasta después de 1750. En cuanto a los procesos seculares de cambio, no se observa ningún salto cualitativo en el periodo 1600-1750: hubo una continuidad esencial entre el largo siglo XV, y el XVII, con la única gran diferencia de una expansión y una contracción, de un desarrollo y un menor desarrollo.
La resistencia republicana en las entidades federativas de México
Patricia Galeanahistoria
El propósito de la obra La resistencia republicana en las entidades federativas de México es estudiar cómo se vivió este proceso histórico en cada rincón del territorio nacional. Nuestra historia no se puede comprender a cabalidad sin analizar lo acontecido en los estados de la República. Las historias matrias conforman a la historia Patria.
Hay aspectos comunes en todas las regiones. El país entero se dividió entre republicanos y monarquistas, pero en todas, a pesar de sus conflictos políticos internos, se formaron juntas patrióticas y se organizó la resistencia republicana. En la medida de sus posibilidades, colaboraron con hombres y pertrechos en la defensa del país. La lucha contra la intervención extranjera cohesionó a la nación mexicana.
Patricia Galeana
Elogio de la impureza
Mauricio Tenorio Trillohistoria
¿Por qué un hecho histórico tan innegable como la integración —el mestizaje, la mescolanza entre todo tipo de pueblos e ideas— ha dado lugar a historias tan distintas entre Canadá, México y Estados Unidos? Mauricio Tenorio trata de explicar el devenir de esta diferencia entre lo que se ha conocido como “mestizaje” en la historia mexicana y en la estadounidense como miscegenation —¿por qué el mito de la mezcla? ¿por qué el tabú de la mezcla? —. Por otro lado, el libro propone una redefinición del mestizaje a escala norteamericana para enfrentar los violentos riesgos originados por la desigualdad, los populismos y la catástrofe ecológica.
La desigualdad y la mentira de la raza han estado íntimamente unidas en Norteamérica. La lucha antirracista en Estados Unidos ha sostenido por décadas su apuesta por reivindicar identidades raciales y despreciar o negar el mestizaje. En México, después de hacer del mestizaje una idea de Estado, cada vez más se asume que el antirracismo debe ser como el de Estados Unidos. Este libro propone “mexicanizar” la historia de Estados Unidos y Canadá —porque no queda más que aceptar el mestizaje y utilizarlo para buscar mejores escenarios sociales— y “desgringar” los debates mexicanos alrededor de raza y desigualdad — que de manera creciente denuncian el mestizaje con nuevas categorías como “afromexicanos”, “White Mexicans”, “afromestizos”, “mestizos reindigenizados”—.
Este ensayo es una ventana actualizada a la complejidad de las paradojas y mitos que giran en torno a los temas que aborda, expresada con el desenfado y el ingenio característicos del autor.
Historia breve de la Revolución Mexicana
Felipe Ávilahistoria
El Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) encargó a los historiadores Pedro Salmerón y Felipe Ávila hacer una síntesis de la Revolución Mexicana para difundir la perspectiva de nuestro tiempo sobre la etapa fundacional del México del siglo XX. Siendo Salmerón especialista del villismo y el carrancismo, y Ávila del zapatismo y la Soberana Convención Revolucionaria, ambos suman el conocimiento de todo el proceso revolucionario.
Los investigadores estudian las causas políticas, económicas y sociales que provocaron el estallido revolucionario, debido a la concentración del poder y de la riqueza de la dictadura porfirista. Dan cuenta de los despojos y agravios que había sufrido la población rural en las diversas regiones del país, que la llevó a incorporarse a la revolución maderista.
La obra de Salmerón y Ávila es una respuesta a aquellas propuestas historiográficas revisionistas que descalifican al proceso histórico que conocemos como Revolución Mexicana. Este proceso tuvo varias etapas y distintas revoluciones que convergieron en contra de la dictadura y de la contrarrevolución. Los autores estudian las diferentes corrientes revolucionarias que se enfrentaron entre sí tras el derrocamiento del gobierno contrarrevolucionario usurpador: la constitucionalista, la convencionista, villista y zapatista, y sus proyectos contrapuestos.
Finalmente, los historiadores analizan los efectos que tuvo la Revolución para México. Destacan la experiencia de las clases populares como agentes transformadores de los grandes cambios; la creación de un nuevo Estado, producto de un nuevo pacto social, y la reforma agraria, caracterizada por la pérdida del poder de los terratenientes, que dio origen a una nueva conformación del campo mexicano, donde ejidatarios y comuneros tuvieron un papel esencial. Concluyen destacando la importancia de la Revolución, cuyos principios fueron ejemplo de los movimientos populares del siglo XX y lo que va del siglo XXI.
El legado de Hipatia
Margaret Alichistoria
Hipatia de Alejandría, la abadesa Hildegarda, la "loca Madge'; duquesa de Newcastle, la notable Émilie du Chátelet, Caroline Herschel, descubridora de cometas... distinguidas científicas cuyos nombres han sido hechos de lado en los libros de historia, cuya obra ha sido suprimida o escamoteada y cuyas realizaciones han sido negadas.
En este estudio, que abre nuevos horizontes, Margaret Alic empieza a corregir ese desequilibrio y a descubrir una herencia perdida de logros de las mujeres en la ciencia. Lo hace con una gran riqueza de evidencias biográficas y científicas y, así, su libro proporciona una fascinante penetración en la vida y tiempos de las mujeres en la ciencia desde la prehistoria hasta finales del siglo XIX.
El legado de Hipatia nos proporciona la posibilidad de entrar en un importante y descuidado aspecto de la historia de las mujeres, y es una fuente esencial para todos los interesados en la historia de la ciencia, tanto estudiantes como maestros.
El liberalismo mexicano en la época de Mora (1821-1853)
Charles A. Halehistoria
El autor de este libro, Charles A. Hale, que es profesor de historia en la Universidad de Iowa, se ha compenetrado de los diversos factores que, al triunfo de la revolución de Independencia mexicana, crearon las bases de una acción política liberal cuyo origen más profundo no era la Revolución francesa ni la prestigiada proyección ascendente de los Estados Unidos de Norteamérica, sino la fresca corriente liberal que provenía, desde la Colonia, de las Cortes de Cádiz, con su tradición reformista. Y esta influencia, dice Hale, afectaba tanto a liberales –sobre todo a José María Luis Mora, el teórico más importante de ese movimiento en el período que va de la Independencia a la Reforma–, como a los conservadores, cuya cabeza más destacada fue, sin duda, Lucas Alamán. Unos y otros trataron de dar un sentido y una forma a algo, el Estado independiente, que escapaba a su experiencia. Los liberales, sobre todo, a la vista de las transformaciones sociales que revolucionaban al mundo entero, intentaron crear una nacionalidad y formular las bases legales para la constitución de una república similar a las más avanzadas de ese tipo, con instituciones y formas de gobierno que al mismo tiempo que miraron por el bienestar de todos dejaron ampliamente protegidos los derechos individuales. Pero esto, en una sociedad sin tradición respecto a la autoridad local, históricamente oprimida por un poder central y en la que los privilegios de las corporaciones eran casi sagrados, resultó tarea casi imposible.
Hale estudia el proceso creado por estas ideas y estos hombres y procura definir con mayor claridad el papel que cada uno de ellos desempeñó en la historia con imparcialidad e interesado desapasionamiento.
La Cristiada
Jean Meyerhistoria
La guerra que entre 1926 y 1929 —y en menor escala entre 1934 y 1938—enfrentó a miles de campesinos con un gobierno que se asumía como producto de la triunfante Revolución Mexicana estuvo durante largas décadas bajo el manto del tabú. La composición social de quienes la pelearon, el ánimo jacobino — apenas reprimido— de algunos generales revolucionarios, la hostilidad entre el nuevo Estado mexicano y el Vaticano hicieron que ese largo y cruento episodio de nuestra historia se estudiara poco, casi a hurtadillas, hasta que a comienzos de los años setenta se publicó La Cristiada, libro señero por su método, su profundidad y su empatía con los vencidos. Durante siete años, Jean Meyer hurgó en archivos, realizó encuestas y registró conversaciones con muchos sobrevivientes de este choque fratricida: fruto de esa dedicación es el libro que hoy, cuarenta años después de su primera edición, publica Siglo XXI Editores.
En esta historia política y diplomática México, Washington y Roma ocupan el primer plano, con la Iglesia mexicana enfrentada al Estado nacional y al Vaticano, en un conflicto en que el petróleo no anda lejos del agua bendita y en el que resuenan la reforma agraria y las ideas de vanguardia del gobierno. La obra de Meyer está tejida de narración y análisis, de historia militar, económica y sociológica, y es a la vez un ambicioso intento de interpretación, un discurso sobre otros discursos: el de Calles —que no es el de Obregón—, el de la Santa Sede — que no es el de la Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa ni el del arzobispo de México—, el de los estadounidenses.
Este primer volumen aborda la guerra de los cristeros a partir de la palabra de los propios actores: los católicos de pie, la jerarquía eclesiástica, los combatientes de uno y otro bando, los generales —tanto el mítico Enrique Gorostieta como Obregón y Calles—, presentes en este relato vivo y doloroso de la confrontación. El autor tiene cuidado en mostrar que los cristeros no fueron gente de la Iglesia, ni católicos haciendo política, ni lacayos de los obispos, ni instrumentos de la Liga. Tiene razón Jean Meyer: “a la Cristiada se la puede leer como la Ilíada”. Quien se asome a estas páginas “no dejará de probar una emoción profunda al leer cada uno de los episodios de esa epopeya que pertenece al patrimonio de la humanidad”.
El moderno sistema mundial IV
Immanuel Wallersteinhistoria
La aparición en inglés del primer volumen de El moderno sistema mundial supuso en 1974 el comienzo de una verdadera revolución en la historiografía y un fuerte impulso al renacimiento de la sociología histórica. Más allá de las discrepancias y las polémicas a las que ha dado y está dando origen, esta obra es ya un clásico. Su argumento central es que el moderno sistema mundial toma la forma de una economía-mundo capitalista, que tuvo su génesis en Europa en el largo siglo XV, e implicó la transformación de un modo de producción tributario o redistributivo específico, el de la Europa feudal, en un sistema social cualitativamente diferente, Desde entonces, la economía-mundo capitalista se ha extendido geográficamente hasta abarcar todo el globo; ha seguido un modelo cíclico de expansión y contracción y una localización geográfica variable de los papeles económicos (el flujo y el reflujo de las hegemonías, los movimientos ascendentes y descendentes de los distintos centros, periferias y semiperiferias), y ha sufrido un proceso de transformación secular, incluyendo el avance tecnológico, la industrialización, la proletarización y el surgimiento de una resistencia política estructurada al propio sistema, transformación que está aún en marcha.
En este volumen IV el acontecimiento clave se ubica en las consecuencias culturales de la Revolución francesa para el moderno sistema-mundo como un todo. Ésta había legitimado el concepto de la normalidad del cambio político y de la idea de que la soberanía no yacía en el soberano sino en el pueblo. Las consecuencias de este par de creencias eran múltiples. La primera fue la creación, como reacción a estos conceptos recién difundidos, de las tres ideologías modernas: conservadurismo, liberalismo y radicalismo. El argumento de este volumen en su conjunto es que el liberalismo centrista logró "domesticar" a las otras dos ideologías y emergió triunfante en el curso del ciclo. Esto adoptó luego la forma de privilegiar la creación de estados liberales, antes que nada en los dos estados más fuertes de la época, Gran Bretaña y Francia. Además tomó también la forma de estimular la creación y de limitar el impacto de los principales tipos de movimientos antisistémicos.