Crítica de nuestro tiempo

Samir Amin
sociología y política
$235
En los grandes momentos de su historia, los pueblos formulan proyectos siempre adelantados sobre las exigencias inmediatas de su época. La Revolución francesa ya hace la crítica del capitalismo, cuando en realidad sólo abre la senda de su desarrollo. Las revoluciones rusa y china, más allá de la recuperación del retraso de sus sociedades, se asignan el objetivo de construir una sociedad nueva, sin clases. Los fatales retrocesos subsecuentes, impuestos por las condiciones objetivas del tiempo, no deben hacer olvidar que la humanidad no avanza más que mediante esos grandes momentos. Hace ciento cincuenta años, El Manifiesto comunista vislumbraba la necesidad de rebasar al capitalismo, entonces todavía en plena juventud. Hoy día, la madurez de las contracciones producidas por ese sistema -la enajenación mercantil, la destrucción de la naturaleza, la prodigiosa polarización de la riqueza mundial- pone a la orden del día el deterioro de la ley del valor. Por ello la afirmación del mercado como regulador exclusivo de la gestión social -la utopía vulgar del capitalismo que inspira a nuestro tiempo- no debe tener porvenir. Más allá de las tímidas respuestas posmodernas al desafío, que legitiman la sumisión a las exigencias del momento inmediato, Samir Amin propone aquí una moderna lectura del Manifiesto. De Samir Amin Siglo XXI ha publicado también El eurocentrismo. Crítica de una ideología (1989) y Los desafíos de la mundialización (1997).

El eurocentrismo

Samir Amin
sociología y política
$215
El eurocentrismo es un culturalismo en el sentido de que supone la existencia de invariantes culturales que dan forma a los trayectos históricos de los diferentes pueblos, irreductibles entre sí. Es entonces antiuniversalista porque no se interesa en descubrir eventuales leyes generales de la evolución humana. Pero se presenta como un universalismo en el sentido de que propone a todos la imitación del modelo occidental como única solución a los desafíos de nuestro tiempo. El eurocentrismo no es la suma de prejuicios, equivocaciones e ignorancias de los occidentales con respecto a los demás. Después de todo, éstos no son más graves que los prejuicios inversos de los pueblos no europeos para con los occidentales. No es pues un etnocentrismo banal, testimonio sólo de los limitados horizontes que ningún pueblo del planeta ha superado todavía. Tampoco es una teoría social, que, por su coherencia global y su aspiración totalizadora, pretenda dar la clave de la interpretación del conjunto de problemas que la teoría social se propone dilucidar. El eurocentrismo es un fenómeno específicamente moderno cuyas raíces no van más allá del Renacimiento y que se ha difundido en el siglo XIX. En ese sentido constituye una dimensión de la cultura y de la ideología del mundo capitalista moderno, y -para Samir Amin- no es más que una deformación, pero sistemática e importante, que la mayoría de las ideologías y teorías sociales dominantes padecen. De Samir Amin hemos publicado ¿Cómo funciona el capitalismo? El intercambio desigual y la ley del valor. La acumulación a escala mundial. Crítica de la teoría del subdesarrollo. Dinámica de la crisis global e Imperialismo y comercio internacional: el intercambio desigual (estos dos últimos en colaboración con otros autores).

Los desafíos de la mundialización

Samir Amin
el mundo del siglo xxi
$490
La mundialización es una dimensión permanente del desarrollo de las sociedades. No obstante, aun cuando en sus formas antiguas permitía acelerar la historia y reforzar las oportunidades de recuperar los atrasos, en las formas modernas asociadas a la expansión capitalista produce sistemáticamente la desigualdad. Los proyectos societarios de la posguerra obligaron al capitalismo a someterse a los imperativos de compromisos sociales más amplios a partir de los cual es los estados subrayaron su legitimidad e instituyeron mecanismos de control de la mundialización. En la crisis actual, el capitalismo intenta volver a su utopía permanente: la de la sumisión de la vida social a la lógica exclusiva del mercado y a la mundialización sin freno. Todas las regiones del planeta se encuentran ya enfrentadas a este mismo problema, pero bajo condiciones extremadamente diferentes. Este libro hace hincapié en esa diversidad de desafíos y en las respuestas que se les da en las diferentes regiones consideradas (Europa, Rusia, China, el tercer mundo). Inapropiadas hasta hoy, esas respuestas ponen en peligro la construcción europea, la reconstrucción de los países del Esté y la inserción activa del tercer mundo en el sistema mundial. ¿Será posible vencer esos obstáculos e imaginar proyectos societarios nuevos capaces de asociarla mundialización profunda de los tiempos modernos con la renovación de las aspiraciones a la liberación y el progreso humanos? El autor sugiere algunas pistas para una reflexión teórica que podría ayudar a avanzar en esa dirección. De Samir Amin, Siglo XXI ha publicado también El eurocentrismo, Crítica de una ideología, y con otros autores Imperialismo y comercio internacional. El intercambio desigual.

Imperialismo y comercio internacional: el intercambio desigual

Charles Bettelheim
economía y demografía
$205
Los autores analizan la relación entre países imperialistas y países dependientes, tratando de dar cuenta del hecho de que, en términos relativos, los primeros son cada vez más ricos y los segundos cada vez más pobres. Esto implica una diferencia sustancial con respecto a los autores de principio de siglo, ya que, a pesar de sus previsiones, la expansión capitalista ha ampliado la brecha entre estos países en lugar de cerrarla; otras leyes han estado operando en la formación del sistema, leyes que escaparon a dichas previsiones. Hoy se comprueba que el capitalismo ha construido un mercado mundial, pero que las relaciones de producción han cambiado de manera distorsionada y en algunos casos ni siquiera han cambiado. Pero, ¿acaso el surgimiento de una nueva clase obrera en la periferia -América Latina, Asia y África- implica que la acumulación acelerada prevista se ha verificado? La respuesta de los trabajos que aquí publicamos es negativa, lo cual de ninguna manera resulta una novedad. La aportación original consiste en el intento de investigar este hecho, relacionando el atraso de los países dependientes con el modo específico en que los nuevos contingentes proletarios se integraron en un sistema de explotación en escala internacional. Este libro desarrolla el modelo expuesto por Arghiri Emmanuel en El intercambio desigual (Siglo XXI Editores) y amplía la polémica que suscitó la publicación de esta importante obra.