Acudiendo a revistas y suplementos efímeros, revisando cuadernos modestísimos, consultando editoriales marginales, carteándose con corresponsales a todo lo largo del continente, leyendo incluso textos inéditos y preguntando siempre por "los nuevos", Julio Ortega, amparado en una austeridad indiscutible, ha reunido esta interesantísima antología de "la poesía más joven" ¿No es la antología una recopilación de lo más granado, reconocido, pasado por cedazos y cribas, sedimentado y listo para intentar, desde el pasado, el gran salto al canon? Lo que hace Julio Ortega en este libro seductor es, precisamente lo contrario: vislumbrar la poesía de mañana, "documentar la escritura allí donde el futuro se está ahora mismo haciendo", aventurar "una intervención en el paisaje cultural", perfilar "una suerte de mapa tentativo de lectura" y dejar que el lector "pueda explorar a su gusto prolongando las rutas de interrogación y celebración, y recorrer su propio tomo de futuro". En tal sentido, nadie podría atreverse a afirmar que aquí "están todos los que son". Al contrario, en todas partes surgirán nombres que podrían muy bien añadirse, con sus poemas, a estas páginas. Tampoco es posible decir que "son todos los que están". Como siempre, será el futuro, ese futuro por el que apuesta el antologador, el que dirá la última palabra. Para cada uno de los poetas incluidos en estas páginas ése es el reto temible al que los enfrenta Julio Ortega. El lector tiene en sus manos -sobre todo, claro está, el lector joven- un libro que puede leerse como una profecía. Pero también un libro, por esa misma razón, inaugural. Ortega ha fijado sus ojos en un lenguaje poético "tentativo pero intransferible, cotidiano pero distintivo, subjetivo pero documental". Auspiciando "la teoría cultural de este fin de siglo", Ortega lee "objetos culturales que han perdido su estatuto normativo, su índole disciplinaria prefijada, su familia de imágenes retrazable, y se han hecho híbridos, desplazados de su origen, fronterizos, con un desenfado que rompe la saturación del lenguaje". No sólo hay aquí una apuesta por unos nombres, sino también por una tendencia cada vez más poderosa que puede permear la poesía de nuestro cercano futuro.
Siglo XXI ha publicado, también compiladas por Julio Ortega, Antología de la poesía hispanoamericana actual (1987) Y Antología del cuento Latinoamericano del siglo XXI. Las horas y Las hordas (1997).