El moderno sistema mundial II

Immanuel Wallerstein
historia
$480
La aparición en inglés del primer volumen de El moderno sistema mundial supuso en 1974 el comienzo de una verdadera revolución en la historiografía y un fuerte impulso al renacimiento de la sociología histórica. Más allá de las discrepancias y las polémicas a las que ha dado y está dando origen, esta obra es ya un clásico. Su argumento central es que el moderno sistema mundial toma la forma de una economía-mundo capitalista, que tuvo su génesis en Europa en el largo siglo XV, e implicó la transformación de un modo de producción tributario o redistributivo específico, el de la Europa feudal, en un sistema social cualitativamente diferente, Desde entonces, la economía-mundo capitalista se ha extendido geográficamente hasta abarcar todo el globo; ha seguido un modelo cíclico de expansión y contracción y una localización geográfica variable de los papeles económicos (el flujo y el reflujo de las hegemonías, los movimientos ascendentes y descendentes de los distintos centros, periferias y semiperiferias), y ha sufrido un proceso de transformación secular, incluyendo el avance tecnológico, la industrialización, la proletarización y el surgimiento de una resistencia política estructurada al propio sistema, transformación que está aún en marcha. Desde tal perspectiva, el siglo XVII, entendido como el periodo que va desde 1600 a 1750, aproximadamente, es ante todo un ejemplo del modelo cíclico de expansión y contracción. En lo que respecta a la geografía general del sistema mundial, las fronteras creadas hacia 1500 no variaron de forma significativa hasta después de 1750. En cuanto a los procesos seculares de cambio, no se observa ningún salto cualitativo en el periodo 1600-1750: hubo una continuidad esencial entre el largo siglo XV, y el XVII, con la única gran diferencia de una expansión y una contracción, de un desarrollo y un menor desarrollo.

¿Qué es esa cosa llamada ciencia?

Alan F. Chalmers
teoría
$335
Este libro pretende ser una introducción simple, clara y elemental a los puntos de vista modernos sobre la naturaleza de la ciencia. El estudiante de filosofía de la ciencia no dispone de un único libro o de un conjunto reducido de textos para introducirse en el tema. Las únicas fuentes con que cuenta sobre las modernas perspectivas en este campo son las propias obras originales de las principales figuras actuales de la filosofía de la ciencia. Pero éstas son demasiado numerosas y con frecuencia difíciles para un estudiante. El presente trabajo no pretende evidentemente sustituir a las fuentes originales para quien desee dedicarse a un estudio en profundidad de la filosofía de la ciencia contemporánea, pero sí proporciona un punto de partida útil y fácilmente asequible. Tras señalar las limitaciones del empirismo ingenuo, el autor describe y valora las teorías de Popper, Kuhn, Lakatos y Feyerabend como intentos de remplazar aquella perspectiva tradicional, cerrando el libro con una visión de la ciencia basada en las obras de Bachelard y Althusser. Habiéndose formado en la escuela popperiana, Chalmers subraya sus más notables virtudes, especialmente el hincapié en la búsqueda de claridad y sencillez en la exposición de los problemas, pero no ignora sus limitaciones. Su trabajo une así la sencillez con una forma antidoctrinaria sumamente saludable.

El moderno sistema mundial I

Immanuel Wallerstein
historia
$480
Frente a la historiografía tradicional, que se mueve en el ámbito de sociedades nacionales o, cuando más, de áreas continentales o subcontinentales, El moderno sistema mundial constituye un muy ambicioso intento de reconstruir la historia de la actual sociedad capitalista partiendo, desde sus mismos orígenes, de una perspectiva global. Para el autor, la única unidad válida de análisis en semejante investigación son los sistemas mundiales, debiéndose abandonar todo intento de conceptualizar el desarrollo de la sociedad actual a partir de sistemas menores. Igualmente, la cuestión de carácter capitalista o no de una sociedad sólo tiene sentido cuando se plantea al nivel de un sistema mundial. En este primer volumen de su obra, que cubre el periodo 1450-1640, Wallerstein traza la aparición en Europa de lo que denomina una "economía-mundo" capitalista, basada en una única división (internacional) del trabajo; y es esta economía-mundo lo que constituye el moderno sistema mundial, cuya evolución hasta convertirse en el único sistema mundial se pretende estudiar en los sucesivos volúmenes de esta obra. La fuerza del trabajo de Wallerstein se deriva de su voluntaria ruptura con los tradicionales límites interdisciplinarios y de su análisis integrado de los distintos sectores ("centro", "periferia" y "semiperiferia") de la economía-mundo (por ejemplo, la Europa occidental y la América hispana), en sus relaciones mutuas y también con los sectores exteriores ("la arena exterior": por ejemplo, el océano Índico).